Los Poemas de la Nana

Me encontraba con mi esposo en la salita de la casa. Pensabamos salir pero no lo hicimos. Llovia con fuerza. Parecia que los elementos de la naturaleza, enojados, descargaban su furia. De pronto nos sobresalto unos fuertes golpes en la puerta. Mi esposo se paro de un salto y se fue a abrir la puerta. Yo lo detuve diciendole: "no, no, no habras". Pero el me dijo: "puede ser alguien en apuros. Con este tiempito no seria nada de raro" Yo insistí: "por favor, no abras". Los golpes de la puerta continuaban. Pero más debiles. Mi esposo abrio y un hombre callo pesadamente a la entrada de nuestra sala. Le dijo a mi esposo: "cierre por favor, cierre, me persiguen unos asesinos contratados para matarme. Yo no soy un delincuente, sino todo lo contrario. Soy un rico industrial. Me buscan para acabar conmigo y despojar a mi hijo que solo tiene 10 años. Soy viudo y mi niño solo me tiene a mi. Parientes ambisiosos quieren mi fortuna, me dispararon y estoy herido. C

Contigo llego el amor pero tambien el dolor El deseo de tenerte El deseo de amarte mas nunca pudo ser Tuve que dejarte Robaste sin piedad mi alma Mataste sin piedad mi corazon Y ahora para vivir no hay razon Te ame tanto tanto Pero tu solo me haz dado llanto Mi cuerpo se aleja de ti Pero todo mi ser  Contigo quiere vivir, quiere vivir Con mi pensamiento estoy contigo Mi gran y unico amor Escucha, escucha mi clamor Escucha la voz de mi corazon Que desesperadamente te llama Porque ¿sabes? Te ama te ama Mi existencia estuvo vacia Y con ansias te busque, te busque  Y casi al final de mi camino En una de sus vueltas callé Por ti, dia a dia, sin ti, desespero Pero recuerda siempre que te quiero Tuve otros amores Pero en mi corazon fuiste el primero

Como era nuestra costumbre desde hace años nos reuniamos. Esta nos reunimos en la casa de una joven señora a la que vimos crecer al faltarle su madre que habia muerto cuando ella era pequeña. Llego con su padre y se establecieron en nuestra ciudad. Los dos y una señora de edad que era la cuidaba de la niña. El padre un señor aun de buen ver, muy serio siempre, con la cara muy triste. Nosotras nos compadeciamos de su viudez. Bueno, sigo con la historia. A la hora de marcharme se acerco a mi la joven señora a la que llamaremos Ana. Ella se acerco a mi y me dijo: "por favor, despues de la reunion quedate, necesito hablar con alguien y quiero que seas tu". Despidio a las demas amigas y me dijo "ven, sientate a mi lado, yo te voy a contar la historia de mi padre y mia. Cuando yo tenía nueve años mama abandono a papa y se fue con otro hombre. Cuando ella se fue, papá quedo desecho. Cambio por completo, se volvio triste, con la cara muy seria. Yo lo veia muy poco, se levantaba